El Fin de la Tierra.
Mientras están en el viaje, Tomoya le compra un robot de juguete que él escogió para Ushio después de su llegada al campo. Al día siguiente, después de estar en una posada la noche anterior, Tomoya y Ushio dan un paseo por la zona a través de un campo de flores. Ushio juega en el campo de flores, donde pierde su robot y ella junto a su padre intenta encontrarlo, pero sus intentos fueron en vano. Al recordar algo de su pasado, Tomoya va a otro lugar y se encuentra con su abuela, Shino Okazaki, la madre de su padre. Ella le cuenta a Tomoya el cómo su padre fue con él a ese lugar poco después de que su esposa murió, diciéndole también el cómo su padre trabajó muy duro para criarlo. Tomoya finalmente llega a un acuerdo con su padre, dándose cuenta de que no era un mal padre. Cuando regresan al campo donde Ushio estaba, ella todavía no puede encontrar el robot y no quiere dejar de buscar porque fue el primer regalo que su padre le dio. Tomoya se da cuenta de sus errores anteriores y se compromete a hacer su mejor esfuerzo para Ushio, para que sea muy feliz ante la perspectiva de estar con su padre. De camino a casa, Tomoya comienza a contarle cosas acerca de Nagisa por primera vez.
Mientras están en el viaje, Tomoya le compra un robot de juguete que él escogió para Ushio después de su llegada al campo. Al día siguiente, después de estar en una posada la noche anterior, Tomoya y Ushio dan un paseo por la zona a través de un campo de flores. Ushio juega en el campo de flores, donde pierde su robot y ella junto a su padre intenta encontrarlo, pero sus intentos fueron en vano. Al recordar algo de su pasado, Tomoya va a otro lugar y se encuentra con su abuela, Shino Okazaki, la madre de su padre. Ella le cuenta a Tomoya el cómo su padre fue con él a ese lugar poco después de que su esposa murió, diciéndole también el cómo su padre trabajó muy duro para criarlo. Tomoya finalmente llega a un acuerdo con su padre, dándose cuenta de que no era un mal padre. Cuando regresan al campo donde Ushio estaba, ella todavía no puede encontrar el robot y no quiere dejar de buscar porque fue el primer regalo que su padre le dio. Tomoya se da cuenta de sus errores anteriores y se compromete a hacer su mejor esfuerzo para Ushio, para que sea muy feliz ante la perspectiva de estar con su padre. De camino a casa, Tomoya comienza a contarle cosas acerca de Nagisa por primera vez.
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